El 23 de octubre, Boca puede ganar el torneo. Tiene muchos rivales pero está ahí.

Si elimina a Patronato, el 30 podría coronarse por Copa Argentina. El día del cumpleaños de Diego Maradona se jugaría la final del certamen.

El 6 de noviembre se va a definir el Trofeo de Campeones 2022 y Boca también podría ser campeón. Ya está en la final esperando por el ganador del actual. O, en el caso de que sea el equipo de Hugo Ibarra, tendrán que jugar por quien sería el rival: Tigre (subcampeón de la Copa de la Liga anterior) y el que salga segundo en el actual campeonato.

El Trofeo de Campeones 2020 también lo tiene a Boca con posibilidades de una consagración. Espera por el finalista: será River o Banfield. El equipo de Marcelo Gallardo por ser subcampeón de Boca en la Superliga 2019/2020 y el Taladro por ser subcampeón de Boca en la Copa Maradona 2020.

El último a la vista es la Supercopa Argentina, un trofeo que también puede obtener Boca, porque la juega el ganador del campeonato y el de la Copa Argentina. River y Boca ya saben que el 21 de enero podrían enfrentarse en Medio Oriente o en una sede a definir.

Este vértigo de definición y definición va a vivir Boca en los próximos meses. Puede ser todo o nada a la vez. Porque el deporte tiene eso, a veces llegás y ganas, y en otras oportunidades llegás y te quedás con las manos vacías. Siendo 29 de septiembre, Boca está ante una oportunidad de lujo de ganar muchos trofeos juntos y demostrar que en el ámbito local siempre es el candidato a todo.

Los números son elocuentes. En los últimos años, casi todos los técnicos se consagraron de uno o más torneos a nivel local. No es algo de ahora, sino que la hegemonía de Boca viene desde hace muchos años. Desde el 2000 para acá es el equipo que más torneos locales ganó (también a nivel continental).

Desde el 2012 en adelante, para tomar los últimos 10 años, casi todos lograron cosas. Falcioni, Copa Argentina y campeonato. Arruabarrena, Copa Argentina y campeonato. Guillermo Barros Schelotto fue bicampeón del fútbol argentino. Alfaro, campeón de la Supercopa y además dirigió 16 fechas de la Superliga que consagraron al equipo de Russo tras 23 partidos. Miguel Ángel Russo, campeón en Superliga y Copa Maradona. Sebastián Battaglia, campeón de la Copa Argentina y Copa de la Liga.

En fin, lo que parece algo nuevo, es algo habitual en los últimos años. Pero no por habitual no deja de ser importante. Ahora es Ibarra el que está cerca de anotarse en esta lista y poder ganar 3, 4, y hasta 5 títulos en pocos meses.

Hasta hoy, el año de Boca, fue a pura competencia. En todos los frentes y en todas las batallas. A evaluación de hoy, ya es el mejor equipo del año. Y si llegara a terminar con estos títulos habrá sido un año aún mucho mejor.

La espina entre las rosas, la de los últimos años... la Libertadores. Si bien Boca no la gana desde el 2007, hace unos años llegaba a instancias decisivas: semifinales en 2016, 2019 y 2020 y una final en 2018. En las dos ultimas ediciones, Boca dejó el certamen en octavos: uno con escándalo mediante ante Atlético Mineiro tras el perjuicio que sufrió. El otro, por penales ante Corinthians.

En definitiva, lo que es un buen año, podría transformarse en un gran año. Lo que podría ser el puntapié para empezar de nuevo a construir el deseo inconcluso, postergado y esquivo de poder lograr el protagonismo de años anteriores en el torneo que más le quita el sueño.