Luego de un intenso camino en el que sufrió algún que otro escollo, Boca se mantuvo sereno hasta llegar a la semifinal y debía cruzarse con un equipo que se catapultaba como uno de los grandes favoritos de la categoría por su gran fase de grupos, como lo fue Municipalidad de Tunuyán.

Sabiendo que el ansiado ascenso estaba en juego, el Xeneize mostró carácter en los primeros dos sets al imponerse 25-23 y 25-21, quedando al borde de cumplir el objetivo. Sin embargo, los mendocinos recuperaron la memoria y no hicieron fácil la historia.

En los siguientes parciales, el conjunto cuyano empardó la serie al 22-25 y 21-25, forzando un quinto set en el que ambos equipos debían poner en riesgo el trabajo de todos estos meses para quedarse con el cupo a la Segunda División.

Los dirigidos por Marcelo Gigante demostraron que estos colores representan la enormidad institucional y se terminaron imponiendo por 15-10 en el último, ganándose la posibilidad de ascender y quedar a un paso de la élite del deporte para el próximo año.

Para colocarle la frutilla del postre, esta noche 21:30 Boca deberá verse las caras con CEF N°5 en la gran final, equipo con el que perdió en primera ronda y en donde ya no corre riesgo el pase a la Liga Nacional, pero sí será por el honor de levantar el trofeo.