Una de las primeras gestiones de la era Ameal - Riquelme, fue traer a Cardona de vuelta al Club. Jugador super fetiche de Román, Edwin volvió a vestir la casaca Azul y Oro, entre principios del 2020 hasta fines del 2021. Sus diferentes tomas de decisiones, le hicieron perder terreno, hasta que su etapa en el club culminó. Se fue libre y Racing lo fichó.

Con un buen o mal recuerdo, Cardona dejó su huella en el equipo de la Ribera. En ambas eras que transcurrió, jugó 46 partidos en cada una. Y en esas dos etapas, fue más lo que ganó que lo que perdió. El problema radicó fuera del verde césped. Pero desde su salida, un sorpresivo dato se destaca en el plantel.

Este sábado, Boca y Racing se medirán en el Estadio de Lanús, en búsqueda de ser el primer finalista de la Copa de la Liga. Fernando Gago optó durante casi todo el torneo, dejar a Edwin sentado en el banco de suplentes y entrar en algunos segundos tiempos. Sin embargo, sabe del potencial que le puede aportar y que podría definir un partido. ¿Cómo? Su pegada.

Desde que el colombiano se fue de Boca, el plantel de Battaglia no volvió a anotar un gol de tiro libre oficialmente. Si bien desde los pies de Chango Zeballos, Battaglia encontró un ejecutante desde la pelota parada en contextos favorables (le marcó a Colo Colo en el torneo de verano), el juvenil de a poco suma minutos y no está entre los titulares habituales.

El hoy número 20 de Racing, no solo aporta desde las ejecuciones de tiro libre, sino que se encargaba de todas las pelotas detenidas, que hoy se reparten entre Villa, Salvio, Óscar o propio Zeballos, cuando ingresa. Y, asimismo, algo que padece el equipo actual, es la falta de gol de sus mediocampistas.