El puntero del campeonato rodará la pelota en Rosario ante Newells, con la premisa de estirar la ventaja ante sus perseguidores y, por qué no, consagrarse campeón con algunos resultados a su favor. Este sprint final tiene a Boca como el mejor de los últimos meses y su campaña empieza a terminarse.

El Xeneize comenzó el torneo con Sebastián Battaglia, recientemente campeón y con la clasificación a los octavos de final de la Libertadores. Pero la aventura del ex jugador más ganador de nuestra institución, se terminó a principio de julio cuando quedó eliminado con Corinthians. Hasta entonces, apenas disputó seis fechas del campeonato local, con cierto descuido por haberse enfocado en el certamen internacional.

Ibarra agarró el interinato ante San Lorenzo, en el clásico que se jugó en el Nuevo Gasómetro. Luego de caer y dar unos días de trabajos, el Consejo de Fútbol lo ratificó y ya lleva 17 encuentros a cargo del plantel profesional. Con críticas decisiones, que cada uno tendrá su análisis, acomodó el barco y recuperó la mente ganadora.

Pero en la transición de Battaglia y la asunción de Ibarra, Boca dejó varios puntos en el camino, sobre todo de visitante. Algo que hoy revirtió y podría cerrar una campaña de campeón: en total, son 11 partidos fuera de la Bombonera; el conjunto de la Ribera ganó seis, perdió cuatro y empató uno. ¿La curiosidad? Que los partidos que se perdió fue previo al cruce de Octavos y los primeros tres partidos de Ibarra fuera del templo.

Aún quedan dos en la vista: Newells y Gimnasia de La Plata, en los 81' pendiente tras los incidentes en el Bosque. Y, además, de sacar los seis puntos posibles, automáticamente Boca será el nuevo campeón del fútbol argentino.