Los primeros tiempos en Boca del nacido en Buenos Aires no fueron fáciles, la gente lo miraba de reojo y su juventud por momentos le jugaba una mala pasada con errores inusuales. De hecho, fue cedido para agarrar continuidad en otros equipos.

Primero Antofagasta de Chile, posteriormente Lanús, fueron los sitios que le permitieron a Rossi agarrar experiencia y sobre todo confianza. El último tramo en el Granate fue más que bueno. Esto permitió que a comienzos del 2021 el Xeneize decida repatriarlo.

En principio fue suplente de Esteban Andrada. Más adelante, con su transferencia al fútbol mexicano, Agustín se quedó con el arco boquense. Ya se notaba una madurez diferente a la del primer ciclo y la excelencia en los penales lo colocaron de a poco en figura.

En total atajó 15 penales, 11 en encuentros oficiales y 4 amistosos alcanzando el cuarto puesto histórico de Boca, empatando a Agustín Orion. Solo le queda delante Óscar Córdoba, Carlos Fernando Navarro Montoya y Roberto Abbondanzieri.

Si tomamos como parámetro fases de eliminación que se definieron desde los doce pasos, con Rossi en el arco, Boca sorteó cinco sobre siete posibles. Su preponderancia en partidos decisivos también se notó; en La Plata para vencer a Estudiantes, en el Monumental en el triunfo ante River, la Final de Copa Argentina pasada ante Talleres, la Semifinal de la última Copa de la Liga con Racing y así un sinfín de partidos.

En Rossi Boca encontró seguridad, encontró resultados, encontró manos de oro. Battaglia tiene el arco de su equipo en buenas manos.