El futbolista nacido en Callao Perú arribo al Xeneize el 31 de enero del 2020. En aquel entonces había una gran expectativa depositada en él a partir de su paso por Europa y su presente en la selección. Tal es así, que en la presentación que se llevó a cabo en Casa Amarilla, Bermúdez lo definió como: "defensor de verdad, mente con categoría y tiene todo para estar en Boca".

Sin embargo, nunca logró consolidarse en el primer equipo y mucho menos argumentar con creces la confianza depositada en él. Primero, quedó relegado por Lisandro López en el puesto de primer marcador central; luego ante la partida de Licha, fue el propio Izquierdoz que ocupó esa posición, impidiendo así transformarse en titular indiscutido.

Exceptuando algunos partidos de la fase de grupo de la Copa Libertadores de América, donde Zambrano fue titular a partir de las suspensiones de Cali y Rojo, no revirtió su imagen en lo que va de la temporada.

Como si esto fuera poco, en los últimos días se suscitaron dos hechos que lo colocaron aún más en el ojo de la tormenta: Primero, el conflicto con Benedetto en el entretiempo ante Racing; y segundo las imprudencias cometidas ante Atlético Tucumán el fin de semana. Ante el Decano cometió una infracción en el primer tiempo que lo expuso a la expulsión donde afortunadamente fue amonestado y sobre el final del partido se vio involucrado en una acción sumamente polémica, que podría haber culminado con la sanción de un penal para Atlético en el último minuto por codazo.

Teniendo en cuenta que por delante se vienen partidos determinantes para el campeonato y Boca posee defensores de la talla de Figal, Rojo, Roncaglia, Aranda ¿Es necesario que Zambrano siga en el 11 con estas actuaciones?