La imprevista asunción y confirmación de Hugo Ibarra llevó su tiempo de adaptación. Empezó justo en el clásico ante San Lorenzo, donde cayó 2 a 1, y atravesó una seguidilla de alto y bajos, con mucha irregularidad. La goleada sufrida ante el Patrón parece haber sido el click necesario para cambiar justo a tiempo y volver a la base ganadora.

Aunque se dejaron pasar dos puntos de oro ante Huracán, que nos hubieran permitido compartir la punta del campeonato junto a Gimnasia, Boca se enfrentó a un gran rival y mantiene el invicto de 10 partidos. Pero no solo no pierde, sino que hoy tiene detalles del equipo de Battaglia que levantó la Copa ante Tigre. ¿A qué se debe?

Desde el partido en Paraná, Boca cambió decididamente. Cada partido el cuerpo técnico lo piensa de alguna manera diferente, pero hay algo que ya no es coincidencia, sino es causalidad del mensaje que baja Ibarra: el equipo se arma de atrás para adelante. Y hoy, el Xeneize, recuperó la solidez defensiva que lo caracterizó hace unos meses. En los últimos 10 partidos, solo recibió tres goles y mantuvo la valla invicta en siete encuentros.

¿Por qué recuperó la memoria? ¿Por qué volvió a la base ganadora? Porque en el mejor transcurso de la era Battaglia en este 2022, logró algo muy similar. Luego de la derrota 0 - 2 ante Corinthians, donde el barco de Sebastián se sacudió con la obligación de mejorar imperiosamente, logró 10 partidos invictos, donde solo le marcaron dos goles, convirtiéndose en un equipo difícil de anotarle y destacando la solidez defensiva, como una de sus primeras armas.