Luego de una dura derrota como fue la de anoche visitando a Unión en Santa fe, la palabra de Juan Román Riquelme transmite lo que se vive puertas adentro en Boca.

Fiel a su estilo, Riquelme aseguró que el equipo no jugó el mejor partido, pero al mismo tiempo respaldó al entrenador y al plantel.

"Cuando vos jugas mal, te va a tocar perder, que fue lo que pasó ayer, pero tomo las cosas con calma. Jugar nueve partidos en 40 días es demasiado, y en tres días tenes que jugar de nuevo. En una semana jugas dos partidos bien o ganás dos partidos y dicen que sos una maravilla y si después jugas mal dos partidos y dicen 'este equipo está mal', y se van muchos entrenadores", manifestó en diálogo con Tyc Sports.

En esa misma línea mostró su apoyo para Diego Martínez, que aun se está adaptando al mundo Boca: "Estamos contentos de cómo está intentando jugar el equipo, con nuestro DT. Creemos que los partidos de local lo viene haciendo muy bien. Con Sarmiento jugamos muy bien, debimos haber hecho más goles, con Belgrano y Central Córdoba lo hicimos bien y con River fue parejo, pero es difícil para el DT, es nuevo, no tiene tiempo de trabajo y los muchachos no son máquinas, es lógico que estén cansados y algunos partidos jueguen bien y otros no tanto".

Luego puso en tela de juicio el calendario que están teniendo los equipos en el fútbol argentino, asegurando que se juega muy seguido y eso no hace más que perjudicar a los protagonistas.

"Van 40 días. Yo no podría jugar nueve partidos en 40 días. Es muy poquito. Están jugando muy seguido los chicos. Hay que tenerlo en cuenta eso, también. Para mí lo más lógico es el torneo largo, porque te da más tiempo, más tranquilidad, los entrenadores pueden trabajar más tranquilos. Es todo nervios. Ya se fueron seis o siete entrenadores", argumentó.

Por último, se refirió a la figura de Frank Fabra, quien parece que corre de atrás en cuanto a la consideración del entrenador: "Puede ser que Fabra sea el mejor lateral del plantel para ustedes y para mí, pero el que decide es el DT. Estamos contentos de cómo lo hacen Blanco y Saracchi. Es lindo que el entrenador tenga el problema de saber a quién pone", sentenció.