La pasaron mal en los días previos, por la emboscada de los barras de Fluminense a las familias Xeneizes, después la represión policial en las playas de Copacabana. El acceso fue pésimamente organizado, ahí les robaron los vendedores ambulantes y las fuerzas de seguridad les volvieron a pegar. Fue una vergüenza todo lo que les hicieron.

La cantidad de historias que escuchamos durante estos días, fueron impresionante y muy conmovedoras. Llegaron a pie, en bicicleta, en moto, auto, micros, aviones, etc. Demostraciones de pasión por doquier y de amor por todos lados. Se la bancaron y dieron la cara. Son únicos y nadie puede igualarlos.

El movimiento popular más grande ??? pic.twitter.com/5hlSHkrQrg

- Leandro Aguilera (@Tato_Aguilera) November 3, 2023

Un argentino que está radicado en Río de Janeiro hace 30 años me dijo "Esto nunca lo vi. Que un club llene toda la playa en un banderazo. Esto es increíble." Eso marca de cuerpo entero todo lo que vivimos en Río de Janeiro.

También podemos agregar la historia de un chico que rifó su Play Station, como así también su padre rifó su moto, para poder presenciar en Río de Janeiro un fin de semana, que pese a que no concluyó con la tan deseada séptima, quedará en la historia por la muestra de amor más grande del mundo.

El equipo no ganó la Libertadores y el dolor es muy grande, pero el hincha de Boca está orgulloso de sus colores e historia. Hoy, con la derrota, los simpatizantes volvieron a copar las playas cantando, alentando, apoyando.

Al hincha de Boca hay que agradecerle eternamente por cada demostración de amor durante todos estos días como de manera permanente lo hacen.