Lo expresó Hugo Ibarra en conferencia de prensa: su principal objetivo es primero defenderse bien, mantener el bloque del fondo ordenado y cuidar el cero en nuestro arco. Desde allí, empezar a mejorar de mitad hacia adelante, donde el peso ofensivo de Boca - a veces - juega por sí solo. Sin embargo, en búsqueda de una solidez defensiva, el DT Xeneize probó con todas las alternativas posibles.

Desde que tomó el mando del equipo, se sentenció la salida de Cali Izquieroz, que era junto a Rossi y algún otro futbolista más, la única fija del plantel. La partida del capitán a Europa, sembró un interrogante, ¿cómo será la zaga titular de Boca? Durante los primeros cuatro partidos, fue Zambrano - Rojo, pero desde una lesión de Marcos, nunca más pudo consolidar dos centrales como los titulares inamovibles.

El imprevisto ante Patronato, con la repentina salida de Marcos Rojo, le dio el reestreno a Facundo Roncaglia con la casaca Azul y Oro. Durante dos partidos compartió dupla con Zambrano, pero por Copa Argentina empezó un recambio de centrales que la definimos como "las mil y unas zaga de Boca".

Para el cuerpo técnico es fundamental volver a recuperar la memoria y hay que empezar a ordenar las ideas y al equipo. ¿Cómo? De atrás para adelante. Con el arco asegurado por Rossi; con Advincula y Fabra como laterales; el trabajo pasa entre el 2 y el 6: ante Agropecuario fue Roncaglia - Figal; vs Racing, Zambrano - Figal; contra Rosario Central, Roncaglia - Sandez; en Varela ante el Halcón, Roncaglia - Figal; contra el puntero Tucumán, Zambrano - Figal; y el próximo partido será Roncaglia - Rojo.

Lo curioso pasará que, ante Colón, Figal también formará parte del once, en el lateral derecho en lugar de Luis Advincula suspendido. De mostrarse bien físicamente, Marcos Rojo, líder y capitán de este equipo, no debería salir del equipo inicial. La pregunta es, ¿quién lo acompaña? ¿Figal? ¿Roncaglia? ¿Zambrano?