¿Qué significa bancar a un técnico? ¿Ser obsecuente, chupa media, no ser crítico? Bancar a un técnico significa cuestionar las cosas buenas y las malas, los aciertos y los defectos, pero en ningún momento cuestionar su continuidad. Esto la determinan los resultados y, en el caso específico de Sebastián Battaglia, nunca fueron negativos, más allá de alguna derrota o de un empate circunstancial.

Desde que Seba asumió, los resultados no fueron malos: el equipo no estaba clasificado para la Libertadores y lo logró, en el campeonato estaba muy relegado y no era esperable que se clasifique como campeón. Ni siquiera se preveía que clasifique a la Copa, todos especulábamos que lo íbamos a hacer mediante la Copa Argentina y lo terminamos haciendo por puntos. Ganó el torneo más federal, ganó el torneo de verano y ahora está luchando dos torneos, donde en uno ya es semifinalista y en el otro pelea la clasificación en una posición más que beneficiosa porque le quedan dos partidos de local, que igual hay que ganar -le alcanza con ganar uno solo-.

Está claro que el equipo evidenció un crecimiento muy importante en estos cuatro o cinco partidos, sin olvidarnos que en el campeonato le ganó al mejor equipo de la zona como Estudiantes, le ganó el clásico a River de visitante y que no perdió ninguno fuera de casa. El déficit que mayor que tuvo fue el de no poder ganar en una Bombonera llena con algunos murmullos de algunos hinchas millenials, que no entienden que el Templo tiene que jugar a favor.

A nivel objetivos, cuando restan algunos partidos para terminar el semestre, se han cumplido. Pero en cuanto al juego, no se terminó de concretar. Está claro y se lo decimos a Battaglia, no somos por eso ni golpistas ni mucho menos. Este servidor siempre opinó que la continuidad de Seba no tiene que estar en juego. Por eso, esta continuidad es una decisión acertada, que con el tiempo va a ser aún más acertada, y que está basada en los logros y en lo aprendido.

En estos últimos tiempos hay que destacar la reaparición de Varela como dueño del equipo, ahí el DT dio un paso a favor para aprovechar la mejor versión de Pol para jugar abierto, ya que antes lo ponía por adentro porque Alan no estaba disponible por lo que todos sabemos -inconducta- y no tenía otras opciones, ya que Campuzano, Rolón y todos los que estaban en ese puesto lo hacían mal.

Otro de los aciertos del técnico fue haber recuperado a jugadores. Bancó a Romero dándole minutos, y eso que todavía no llegó a su pico, no vimos ningún gol de tiro libre o de media distancia. Ramírez, que ha tenido un campeonato paupérrimo, lo mejor de él se vio entrando en los segundos tiempos y se va a recuperar, le va a dar muchas alegrías a Boca. Todos queríamos la mejor versión de Salvio y se está aprovechando. Zambrano nos hizo no extrañar al Cali, a quien preferiría ponerlo recién en la Copa.

Ahora que se viene la semi habría que pensar que, si en cancha neutral y con un rival que viene agrandado, tendría que cambiar de esquema o seguir con tres en el medio. Si sigue utilizando el mismo equipo, es arriesgado, pero está bien mantener la idea.

Es un buen momento de Boca y no es casualidad. No solo es mérito de la levantada de los jugadores, sino del DT, que los coloca en la cancha y les arma la estrategia. El grupo se la jugó por el Seba y se está viendo. No menospreciemos el trabajo que hizo y que viene haciendo. mientras tanto, yo los invito a subirse a la Battglietta.

Opinión Marcelo Lerner - Redactado por Marcos Bishop