En una mañana fría, con neblina y una llovizna que acompañó casi los 90 minutos, Boca recibió a Central Córdoba, por la segunda fecha de la Liga Profesional de Fútbol. Con una alineación similar al debut ante Arsenal, Ibarra tenía el deber de dar vuelta la página y conseguir los primeros tres puntos.

El partido comenzó parejo para ambos, en una cancha que se mostró rápida y mojada. La precisión era fundamental, para los avances y los cortes en defensa. Y cuando la acción para el local se despertó con una doble tapada de Brey, Boca puso segundo y arrancó.

Salida larga para la corrida de Langoni, imposible de alcanzar. Por derecha llegó hasta al fondo y buscó a su socio, que se entienden mejor que nadie. El centro atrás para Morales, que la mandó a guardar de primera. 9 minutos y el Xeneize arriba.

Aprovechó su envión anímico. Empezó a generar más y jugar lejos de su propio arco. Un cabezazo de Velurtas pasó muy cerca del travesaño y estuvo a nada de aumentar la ventaja. Y en el fútbol, hay frases que son inevitables: los goles que no se hacen en un arco, se hacen en el otro. Minutos después, a poco del final de los primeros 45', un centro al corazón del área, se desvió en el segundo marcador Azul y Oro y la pelota tomó una curva que pasó por arriba de Brey. A veces no se merece, pero hay premios. Y es lo que obtuvo Central Córdoba con el 1 a 1.

El entretiempo se habrán ajustado las piezas precisas, porque Boca salió a la cancha a comerse a su rival. Es cierto, es algo que le pasó todo el torneo pasado, que le costó imponerse en el resultado, pero desde la actitud y generación, nunca falló. Los jóvenes que defienden con alma y vida nuestra casaca, buscaron por todos lados. Desde afuera hacia adentro, diagonales, centros, remates desde media distancia. En varias situaciones estuvo cerca del gol.

Cada vez más cerca del final de partido, los de Santiago del Estero se comenzaron a sentir cómodo con la igualdad. Y no podía ser de otra manera, que de pelota parada. Y con ese toque de "a lo Boca". Un centro preciso de Valentín Barco al segundo palo, para la aparición de Fascendin, que se la llevó por delante y terminó al fondo del arco.

Y ahora sí, el ferroviario tuvo que salir de su cueva, buscar aunque sea una igualdad. Pero cuando descuidó el fondo, Boca aprovechó su velocidad y el contraataque. Rodrigo Pittavino arrancó con mucha velocidad y el arquero Lobelos lo tumbó. Claro penal. Y Gabriel Vega se encargó de cambiarlo por el tercero para los de Ibarra, a falta de 3 minutos para el final.

Boca volvió a ganar. Sus primeros tres puntos en esta Liga Profesional de Fútbol. Será un torneo largo, pero sosteniendo lo de la segunda mitad, luchará allá arriba de la tabla. Vamos Boca.