El volante de Granadero Baigorria arrastra una sobrecarga en su gemelo derecho que le impide entrenar con normalidad y a esta altura de la semana, teniendo en cuenta el inicio del certamen continental, es una duda latente.

Las luces de alarma se encendieron el último miércoles cuándo el entrenador Sebastián Battaglia dispuso de un equipo pensando en Arsenal de Sarandí. En ese once los volantes fueron Alan Varela y Esteban Rolón y no Jorman Campuzano. Minutos más tarde llegó la respuesta y no fue la esperada, Pol Fernández arrastra un problema muscular y por tal motivo fue guardado el colombiano qué sería su reemplazante ante Deportivo Cali.

Fernández ya se ausentó en el amistoso que el "Xeneize" desarrolló el último sábado ante Almagro y en lo que va de la semana aún no pudo estar con sus compañeros.

Si bien ha disputado sólo dos partidos como volante central, frente a Estudiantes y River, su desempeño ha sido de excelencia generando una mutación total en el funcionamiento del equipo. Pol le aporta orden al mediocampo, siempre está en el lugar que requiere la jugada y principalmente la lucidez del primer pase para esclarecer el ataque.

Si nos detenemos en las variantes que ha realizado Battaglia en el último tiempo y que generaron un quiebre en el nivel de Boca, la más preponderante fue la de Fernández por Campuzano, más allá de la inclusión a su lado de Medina.

Es por ello que la lesión del volante de 30 años le desordena el mazo al DT que parecía tener todo perfectamente acomodado de cara al comienzo de la Copa.

Ahora bien la pregunta es ¿Qué jugada tiene en mente el entrenador sin su as de espada?