Agustín Rossi suma 140 partidos con el buzo de Boca, sufrió 103 goles y mantuvo la valla invicta 65 veces. Su plus con los penales potencian aún más su destacado momento. En los 90' le patearon 14 veces, atajó 7 y 6 fueron goles.

Rossi, junto con Frank Fabra y Sebastián Villa, son los jugadores de este plantel que más veces enfrentaron a River: 9. El arquero sin dudas sabe lo que significa jugar esta clase de partidos y más en La Bombonera. De local suma 4 Superclásicos.

Cada vez que Boca juega de local, las tribunas hablan y repiten el ya clásico "Rossi es de Boca y de Boca no se va...", y este domingo no será la excepción. El arquero volverá a estar frente a su gente y el grito de guerra se repetirá, aunque esta vez será distinto. ¿Por qué?

Este miércoles, cuando finalizó el entrenamiento en Ezeiza, antes de que el arquero se subiera a su auto, un integrante del Consejo lo invitó a su oficina para dialogar. Rossi aceptó la propuesta, ingresó y escuchó.

Lógicamente, sin su representante presente por el contexto en el cual se dio la reunión, Boca reabrió la negociación. El club le manifestó al arquero "Agustín, queremos que sigas con nosotros" y le hizo saber que la oferta que en su momento fue rechazada por el jugador, aún sigue y seguirá en pie hasta el último día.

Ante esta sorpresa, la respuesta del jugador fue lógica. Agradeció el gesto, pero les recordó que esa oferta ya había sido rechazada y de parte de ellos no habrá marcha atrás. ¿Cuál fue la reacción del Consejo ante esta respuesta?

Verbalmente hubo un pensamiento en voz alta: "¿Y si se mantuviera la misma propuesta pero por menos años?", a lo que, por lo que pude averiguar, si esta idea en un futuro se convierte en una nueva oferta formal, del lado del arquero la pensarían

La idea de Rossi es seguir en Boca, en lo posible un año más, debido a que está por tener familia y permanecer cerca de los afectos será clave para los primeros meses de su bebé. Claro que no a cualquier precio. Por eso les hizo saber que ante la oferta original su respuesta fue, es y será negativa.

Cuando terminó la reunión, Rossi no se llevó una nueva oferta, pero sí la sensación de que Boca abrió una puerta que hasta ayer parecía imposible de volver a abrir.

Concretamente, Boca reflotó el diálogo y aunque no le entregó una nueva oferta, la sensación que sobrevoló la charla es que, a corto o mediano plazo, van a seguir hablando.

De acuerdo a las posturas de ambas partes, el único escenario viable para que la renovación llegue a buen puerto es que en algún momento Boca modifique su oferta original y formalmente se la haga llegar al arquero, quizás reduciendo la duración, que originalmente fue de 4 años.

Lo importante es que en la previa de un partido tan especial, el arquero saldrá a la cancha sabiendo que la negociación no está terminada y que posiblemente pronto pueda escribirse un nuevo capítulo. Al parecer, Rossi es de Boca y de Boca no se irá...