La irregularidad del equipo en esta primera mitad del año es notoria. Pese a que la victoria de ayer sirvió para escalar al segundo puesto de la tabla en el Grupo B, de seis partidos solo pudo ganar la mitad y eso generaba algún que otro tipo de dudas en los hinchas.

Sabiendo que el próximo fin de semana será el Superclásico contra River, existía un malestar general debido a que en todos los partidos oficiales de este 2022 Boca recibió goles, tanto en la Copa de la Liga como en la Copa Argentina,

Ni siquiera ante el débil Central Córdoba de Rosario por se pudo mantener la valla invicta y la última línea estaba siendo vista de reojo. Sin embargo, cuando más se necesitaba mantener el arco en cero, sucedió.

En la noche de ayer frente a Estudiantes, Agustín Rossi sacó el traje de héroe al atajar el penal de Leandro Díaz a los 42' del primer tiempo y sirvió para salir sin tantos en contra por primera vez en lo que va del semestre.

Desde que llegó al Xeneize, al arquero le patearon 34 veces desde los 12 pasos: atajó 10 y 4 se fueron desviados. El 41,18 % de los penales que le patearon no fueron gol, siendo una estadística difícil de encontrar hoy en día a nivel mundial.

De esta manera, el karma se terminó en un momento clave. El equipo ya no cargará con esa mala idea durante el clásico y podría ser el puntapié inicial para solidificarse en la zona defensiva pensando a futuro.