Es cierto que Boca se movió muy bien con Izquierdoz para que no haya sorpresas. Pero también hay que tener en cuenta varias cosas. ¿Por qué con Izquierdos sí y con Salvio no? Sin calificar, analicemos lo que pasó por la cabeza del consejo.

Salvio venía de jugar apenas el 40% de los partidos de Boca desde su llega a nuestra institución, en cambio Izquierdoz pocas veces falto. El contrato del toto era varias veces más elevado, mientras que el del marcador central había quedado muy postergado de acuerdo a su entrega.

Es verdad que justo el mes pasado se armó un escándalo público con Salvio que originó que se preguntaran si está bien que ande por las coquetas calles de Puerto Madero a las 2 de la madrugada cuando al día siguiente había que entrenar. Del capitán solo se conoce su conducta positiva.

Muchas fueron las cosas que se analizaron, es más, cuando llegaron estos integrantes del consejo, muchos creían que Izquierdoz era un topo de la anterior comisión y se terminaron convenciendo que era un soldado de Boca.

Boca tiene todo el derecho de determinar cómo se maneja una negociación y quedó demostrado que con el ex-Benfica tenían dudas, en cambio con el Cali no querían sorpresas.

Las cosas están así, a nadie le tomó de sorpresa que Salvio esté contando sus últimas horas en el club y que estos próximos meses nos aseguremos al marcador central. Era la idea y se concretó.