La Cámara deberá decidir, en el arranque de la próxima semana, qué hacer con la medida cautelar impuesta por la Doctora Alejandra Abrevaya, por la cual se postergaron las elecciones en Boca. La Jueza encontró irregularidades en el padrón y por eso no autorizó a votar el pasado domingo 3. Hay dos caminos.

Si la Cámara ratifica el fallo de la Jueza, la investigación seguirá y los comicios serán el año próximo. Teniendo en cuenta la feria judicial, podríamos pensar que serían en marzo o abril del 2024.

Si la Cámara revoca el fallo de la Jueza, dará instrucciones a Boca para que el club convoque nuevamente a elecciones. El domingo 17 es la última fecha posible de este año. Al otro día se desarmarán las carpas que están dentro del terreno de juego.

Si hay elecciones, lógicamente, el ganador elegirá al próximo entrenador y trabajará en el mercado de pases. Del lado de Riquelme, el DT elegido es Diego Martinez. Como venimos contando, era su prioridad. El candidato a Presidente por el oficialismo solo tenía ese nombre. No había otro. Macri eligió a Martin Palermo. Tras el no de Guillermo Barros Schelotto (no quiso meterse en la guerra política), la oposición eligió a Palermo.

Más allá de declaraciones públicas de las dos listas que marcan querer votar lo antes posible, está claro que esto se estiró por un pedido de la oposición. No quieren votar con un padrón trucho (así lo llamó Andrés Ibarra). El hincha y socio de Boca está cansado. Quiere votar ya.

Cuentan ambos bandos que hay chances de que se vote el domingo 17. La Cámara también decidirá si hay que limpiar el padrón o se permite a todos los socios activos, en condiciones, votar. Tal vez el nuevo fallo, vuelva a hacer que quien no esté de acuerdo vuelva a apelar y esto se siga estirando.

Boca necesita terminar con esta guerra política y de egos. El club sale dañado. Ojalá que el socio vaya a votar lo más rápido posible y elija: Riquelme o Macri. Por ende, Martinez (con la chance de la vuelta de Bianchi al club en algún cargo) o Palermo (con otro ídolo del club como manager).

De no votarse este año, lamentablemente, los próximos meses de Boca serán muy difíciles para todos. El estatuto marca que Ameal y Riquelme deben continuar al mando. Macri dijo que es un mandato terminado y que esperará a ver que dicta la justicia. Se está por definir el futuro de Boca. Ojalá sea lo mejor para el club.