Maradona y su último regresó a Boca: Hablar de Diego y contar sobre él, es también referirse a sus regresos. Es que el 10 siempre, por distintos motivos tanto deportivos como personales, tuvo idas y vueltas con los estadios de fútbol, su único y verdadero lugar en el mundo. Para referirnos a su vuelta a Brandsen 805, tenemos que situarnos en el marco del desarrollo de la fecha número 16 del Torneo Clausura de la Primera División del fútbol argentino. Aquella fría jornada que empezó por la tarde y terminó de noche, mostró al Boca del Bambino Veira ganador sobre Racing por 3-2 ante la tremenda algarabía de la gente que vivo al máximo cada intervención de Diego en el encuentro. Sebastián Rambert se transformó en la figura del partido marcando un recordado doblete y Néstor Fabbri, marcó el tanto restante para los Xeneizes. Nacho González (de penal) y Marcelo Delgado anotaron y descontaron respectivamente para Racing decretando así el marcador final. Pelusa jugó '55 aquella noche y como no podía ser de otra manera, se retiró tremendamente ovacionado por la gente.

El día que Tevez llenó La Bombonera sin patear la pelota: ocurrió un día como hoy dentro de la temporada 2015, aquella noche la gente de Boca colmó su estadio y lo preparó de la misma manera que lo hace cada vez que el equipo se juega cosas importantes pese a que esta vez no había en juego ningún tipo de competencia deportiva mediante. La decisión del Apache de volver a su casa mientras atravesaba uno de los momentos más destacados de su carrera, a días de haber disputado la final de la Champions League jugando para la Juventus y frente al Barcelona de Messi y compañía nada más y nada menos, movilizó profundamente a lo fanáticos Xeneizes quienes se encargaron de hacer explotar el estadio y darle al ídolo la bienvenida que se merecía. "Vuelvo en mi mejor momento, no tengo nada para reprocharme, todos los días me levantaba pensando que quería volver", aseguró Carlitos ante 60.000 almas que no podían entender que lo que estaban viviendo a esa hora no era un sueño, si no la más pura realidad, Carlos Tevez había vuelto al club que lo vio nacer con el mismo hambre deportivo y las mismas ganas de siempre.