No siempre se puede ganar gustar y golear, a veces hay que, como sea, conseguir una victoria y sacar los tres puntos. Esto le viene sucediendo a Boca en condición de visitante en estas últimas dos fechas. En dónde el equipo consiguió sendas victorias, pero tan solo por 2-0, ante Lanús (los dos goles fueron en los 5 minutos de juego finales) y hoy ante el calamar, por la mínima diferencia.

Lo más curioso de todo esto, es que, de local, en el predio de Ezeiza, los últimos dos resultados fueron goleadas, por 5-0 ante Estudiantes de Buenos Aires y la más reciente, por 8-0 ante Huracán. Claramente, de local, las adversarias se agrandan y le hacen sentir el roce a nuestras chicas, y cuando visitan Ezeiza, salen a defenderse y especular y suelen llevarse una goleada.

El equipo que logró hoy la victoria formó con, Tórtolo en el arco; línea de 4 atrás con, Dos Santos, Sachs, Espíndola y Cruz; 3 en el medio, Gómez Ares, Huber y Preininger; y el tridente arriba formado por, Rodríguez, Ojeda y Urbani.

El gol de la victoria fue marcado por la inoxidable e histórica número nueve, Andrea Ojeda, quién, a los 40' minutos de la primera parte conectó con una volea un centro desde la derecha de Celeste Gómez Ares para decretar el resultado final. Este resultado permitió a las pibas conservar el segundo puesto, no así subirse a la cima, ya que unas horas antes, en un partido también muy parejo, desgraciadamente para nosotros, la UAI Urquiza logró un triunfazo por 3 a 2 de visitante ante Independiente.